El otro día me quedé mirando embelesada a mi sobrina.
Tiene solo 11 meses, y puedes aprender tanto de ella si la miras despacito, poniendo toda tu atención…
—Awww… esa imagen sí está para derretirse de amor —suspira Lucrecia.
Ufff… 🥰
Verás, esta bebecita hermosa está aprendiendo a caminar.
Y desde ahora muestra su necesidad de ser independiente.
Grita al mundo (bueno, balbucea): “ya soy niña grande”, y se lanza a dar sus primeros pasitos 👣❤️
Pero no lo hace a lo tonto, no.
Ella sabe que necesita estar atenta, sentirse segura,
y tener las manitas listas para soltarse…
y también para agarrarse de su siguiente destino.
No sé cómo, pero lo sabe.
Tiene ese instinto que le dice cuándo soltar y cuándo avanzar.
Y mientras la veía intentarlo una y otra vez, pensé en eso:
en la hermosa habilidad de intentar una y otra vez.
No solo una vez, y si no sale, me echo a llorar.
No.
Se trata de hacerlo, equivocarse, tambalear, y volver a intentar,
hasta que un día… caminar sea tan sencillo,
que ni siquiera podamos recordar cómo fue que aprendimos a hacerlo.
También recordé la primera vez que yo caminé
(bueno… no sé si el recuerdo es mío o lo construí con lo que me han contado).
El punto es que aprendí a caminar en un viaje.
Más específicamente, en una estación de autobuses.
Y me gusta pensar que, desde muy pequeñita,
ya sabía lo que me inspiraba.
Los viajes.
El movimiento.
Los caminos nuevos.
Y lo siguen siendo hasta ahora.
Porque la vida, a veces, se trata de eso:
de aprender a soltarte de lo que te sostiene…
y tener las manos listas para agarrarte a lo que sigue.
Un pasito a la vez.
Con confianza.
Con ternura.
Y con ganas de seguir avanzando, incluso si al principio, tambaleas un poco.
(Como todos al principio).
Así que si hoy sientes que estás aprendiendo algo nuevo…
o intentando algo que te da un poco de miedo…
recuerda esto:
Tú también aprendiste a caminar.
Y si pudiste con eso, podrás con lo que sigue.
Porque mientras sigas dando pasos pequeños... estás avanzando 👣
Ya sabes…
Relájate un chingo y sigue caminando.
Sí, te lo digo porque te quiero 😘
¿Nos conocemos? 🙃
Si quieres saber un poco más del “contenedor de Lucrecia” es Aquí ✨
Venía sólo a completar el título con "suave-suavecito", la única canción en español que se saben mis estudiantes, pero me voy así 🥺❤️ por la imagen de la bebecita
Si nos quedáramos con ese deseo de aprender y absorber con la paciencia y motivaciónde un niño, estaríamos siempre actualizados en conocimiento.